Abogado de alcoholemias. Vía penal y vía administrativa de una alcoholemia
El tratamiento legal de la alcoholemia tiene dos vías principales; la vía penal y la administrativa. Es decir se puede tratar como una mera infracción con una multa o tener consecuencias penales que podría incluir además de una multa cuantiosa, la prohibición de circular con el vehículo e incluso el ingreso en prisión y la inmediata suspensión del carné de conducir. La normativa actual indica que no se puede circular por las vías públicas si el conductor tiene una tasa superior a 0,5 g por litro de alcohol en sangre y si se tratara de conductores profesionales o de conductores noveles el límite será de 0,3 g por litro. Si se conduce con una tasa superior a las anteriormente citadas se considerará infracción muy grave, donde se impondrá una multa y se podría aplicar la suspensión del permiso de conducir.
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Interpretación legal de la alcoholemia
La interpretación de estar bajo la influencia del alcohol la va hacer el juez en función de los datos que se le proporcionen, no solamente de la tasa de alcoholemia, sino que tendrá influencia la información en cuanto a los datos síntomatológicos que se le aporten por parte de los encargados de elaborar el atestado. Es obligatorio someterse a la prueba de alcoholemia cuando se haya implicado en un accidente de tráfico o cuando haya cometido una infracción, además de cuando se le requiera obviamente en un control de alcoholemia. La negativa a someterse a las pruebas se considerará una infracción muy grave y se podrá aplicar una multa que podrá ir acompañadas de una suspensión del permiso de conducir.
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Consecuencias legales del alcoholemia
Según el código penal quien conduzca un vehículo a motor (también un ciclomotor) bajo la influencia de bebidas alcohólicas tendrá un castigo que va de pena de prisión a una multa, o también trabajos en beneficio de la comunidad. Puede ser castigado con una privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores. Hay pena de prisión aplicable a aquellas personas que realicen una conducción con temeridad manifiesta que ponga en peligro la vida y la integridad de las personas, pudiéndo además retirársele el carnet de conducir por un tiempo prolongado. La conducción bajo los efectos de bebidas alcohólicas con tasas de alcohol elevadas en la sangre y además con exceso desproporcionado de la velocidad del vehículo respecto a los límites legales establecidos se considerará temeridad manifiesta con peligro para la vida e integridad de las personas pudiendo ser por tanto aplicable pena de prisión.
Otras consecuencias legales
Las consecuencias legales por beber y conducir posteriormente se van a endurecer cada vez más y van a ser cada vez más estrictas.es importante no combinar alcohol, medicamentos u otras drogas porque esto potenciaría los efectos del alcohol creando efectos secundarios de los medicamentos e incluso potenciando la acción de las drogas lo cual acarrearía consecuencias legales todavía mayores y multiplicaría exponencialmente la probabilidad de accidente de tráfico.
Merino Fernández Abogados puede representarle en casos de alcoholemia cuando se hayan superado los niveles legales establecidosy se entre en la vía penal. Pida cita con uno de nuestros abogados especializados.
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